NUESTRAS FIESTAS Y AHORA A CAMINAR

La Fiestas de la Virgen del Castellar, para siempre, van a ser y  serán, particulares; os  preguntareis  el porque, pues es  sencillo.

Celebrar estas  fiestas es  reunir  a todo un pueblo alrededor de  su Madre: grandes, medianos y  chicos, algun@s  con  mucha  devoción  otras con  menos  pero  siempre están ahí, mirando aunque sea, solo por  curiosidad  que levantan la  cortina  al  compás de la banda o los rezos  del  santo  rosario se asoman a sus  ventanas  o  al  galpón  cuando  escuchan  el sonido  de la  melodía de  los danzantes.

Sabéis amigos  blogueros, celebrar estas  fiestas a veces  también  hace  plantear  que  uno tiene mas  trabajo que  realizar  buscar alternativas para  afrontar la  nueva  evangelización. 

Un cosa  suelo  hacer antes de comenzar las fiestas en los casi  cinco años  de celebraciones,  ponerme al  pie del  altar de San Jose  de  se puede  aprender muchas  cosas  mirarlo y pensar.  

¡Tantas veces hemos reflexionado juntos que la vida de José estuvo marcada por el signo de Abrahán con su obediencia incondicional! José siempre haciendo lo que el ángel diga, aunque sea de noche y en sueños, o en horas intempestivas. Siempre lo que Dios quiera:

“Toma contigo a María, tu esposa, y tomó consigo a su esposa” (Mt 1,20. 24).
“Le pondrás por nombre Jesús (…) Y él le puso por nombre Jesús” (Mt 1, 21. 25).
“Levántate, y él se levantó” (Mt 2, 13-14. 20-21.
“Toma contigo al niño y a su madre. Él se levantó y tomó…”.
“Huye a Egipto. Él se retiró a Egipto” (Mt 2, 13-14).
“Marcha a tierra de Israel. Él tomó consigo al niño y a su madre y entró en tierra de Israel” (Mt 2, 20-21).

Creo que despues de estos  años diré: Gracias, José, por tu ejemplo. Fuiste un gigante en la fe, estuviste cerca de Dios y en comunión con Él, amaste como nadie a Jesús y a María. Gracias por tu profunda humildad, porque te negaste a ti mismo para que se afirmaran María y Jesús, porque hiciste de tu vida un poema de amor manifestado en servicio, providencia, en veladas y desvelos, en ternura y oración.

Con estas palabras  vivi las  Fiestas junto a mi  pueblo,  gracias  todos aquellos que siempre estan conmigo apoyándome   de verdad   muchas  gracias  por  todo,  es  bueno saber que uno  tiene  ese apoyo aunque sea  solo en las  fiestas; ahora  toca  seguir  allí donde Dios  quiera y  como el  quiera...siempre queriendo  hacer su  voluntad.

La experiencia de  vivir  las fiestas es  particular, pues en  ella  uno  puede  observar cada uno de los  gesto  de las personas, algunos  receptivos, otras con  caras de preocupación, otras con caras.... mejor no  decirlo, pero  de  veras es bello  observar y muchas  veces también hacer que no vez  nada porque  el solo  verlo  hacer que uno diga: 

"Gracias  Señor por  darme la oportunidad de mirar y sobre todo  por haberme  regalo  por ese tiempo que  duro  su  amistad  y su cercanía ahora  solo me  toca mirar a tu  Madre  y si es  tu  voluntad también  perdonar y  perdonarme"

Reflexión:

A pesar de todo esta devoción para  con la  Virgen debo decir que es  necesario empezar a preocuparse, por la actitud que están empezando a tomar,  algunas, incomprensibles. Estamos seguros que todos  queremos a la Virgen participando con ella: 
Salve cantada por la Coral, Subida a la Ermita, (por diferentes razones que  no se  suben ya tres años) la ofrenda de flores a la Virgen, el Rosario General  en el silencio de la  noche, la misa por  los  difuntos, etc.,  acompañado por  toda la  gente  grande  y  los  jóvenes ...  seria  bueno seguir  analizando y  buscando  alternativas.  
Que bello  ver a los  Danzantes a los  pies de la  Virgen bailar  es bello  y la verdad para mi como el  Dance de Torres no existe  por el que estoy orgulloso, pero  falta  algo... 
Pues terminaron las  fiestas  ahora  viene las comuniones  que también sera una  fiesta para  todos.

PARA  PENSAR  ALGO CORTO

Cierto día, Dios estaba cansado de las personas.

Ellas estaban siempre molestándolo, pidiéndole cosas.

Entonces dijo: "Voy a esconderme por un tiempo".

Reunió a sus consejeros y preguntó:

"¿Dónde debo esconderme?"

Algunos dijeron: "Escóndase en la cima de la montaña más alta de la tierra".

Otros: "Escóndase en el fondo del mar, no van a hallarlo allí".

Otros: "Escóndase en el otro lado de la Luna, ése es el mejor lugar.

¿Cómo lo hallarían allí?".

Entonces Dios se volvió hacia el más inteligente de sus ángeles y le inquirió: "¿Dónde me aconsejas que me esconda?".

El ángel inteligente, sonriendo, respondió:

"¡Escóndase en el corazón humano. Es el único lugar donde ellos no buscan nunca!"