FELIZ NAVIDAD A TODOS AMIG@S Que la noche buena nos traiga alegría y esperanza en cada uno de los corazones. Con esta imagen maravillosa de mis niños que representaron el Belen viviente en mi parroquia os deseamos
FELIZ NAVIDAD
Querido Jesús en este día, en que llegarás a mi corazón, quiero poder saludarte y desearte un feliz cumpleaños, te pido por todos aquellos que no creen en vos, pero a pesar de ello, festejan tu día, por ellos, para que les devuelvas la Fe perdida, quizá lo perdieron por algo que hicimos te pido perdón.
te aseguro que si algo no te gusto, lo hicimos con alegría,
Vos sabes Jesús que no siempre podemos agradar a todos a pesar de ello, seguimos trabajando por difundir el amor que vos nos dejastes.
Tu memoria, tu pequeñez, me hace ser pequeño entre los pequeños, humilde frente a los humildes, solo te pido que me des la fuerza necesaria para seguir caminando junto a vos.
cuando decides nacer de nuevo cada día y dejar entrar a Dios en tu alma.
Navidad eres tú,
cuando decides nacer de nuevo cada día y dejar entrar a Dios en tu alma.
El pino de Navidad eres tú,
cuando resistes vigoroso a los vientos y dificultades de la vida.
Los adornos de Navidad eres tú,
cuando tus virtudes son colores que adornan tu vida.
La campana de Navidad eres tú,
cuando llamas, congregas y buscas unir.
La luz de Navidad eres tú,
cuando iluminas con tu vida el camino de los demás con la bondad, la paciencia, la alegría y la generosidad.
El pesebre de Navidad eres tú,
cuando te haces pobre para enriquecer a todos y acoges al Niño Dios en tu corazón. Los ángeles de Navidad eres tú,
cuando cantas al mundo un mensaje de paz, de justicia y de amor.
La estrella de Navidad eres tú,Los pastores de Navidad eres tú,
cuando llenas tu corazón con Aquél que lo tiene todo.
cuando conduces a alguien al encuentro del Señor. Los Reyes Magos eres tú,
cuando das lo mejor que tienes sin importar a quién.
La vela de Navidad eres tú,
cuando decides iluminar.
La música de Navidad
eres tú cuando conquistas la armonía dentro de ti. El regalo de Navidad eres tú,
cuando eres de verdad amigo y hermano de todo ser humano. La tarjeta de Navidad eres tú,
cuando la bondad está escrita en tus manos. La felicitación de Navidad eres tú,
cuando perdonas y reestableces la paz, aun cuando sufras. La misa de Navidad eres tú,
cuando te haces alabanza, ofrenda y comunión. La cena de Navidad eres tú,
cuando sacias de pan y de esperanza al pobre que está a tu lado. La fiesta de Navidad eres tú,
cuando dejas el luto y te vistes de gala. Tú eres, sí, la noche feliz de Navidad, cuando humilde y consciente, recibes en el silencio de la noche al Salvador del mundo, sin ruidos ni gran aparatosidad; tu sonrisa, de confianza y de ternura, en la contemplación interior de una Navidad perenne que establece el Reino dentro de ti.
“El adviento es un
tiempo de preparación para la navidad, donde se recuerda a los hombres la
primera venida del Hijo de Dios… Es un tiempo en el que se dirigen las mentes,
mediante este recuerdo y esta espera a la segunda venida de Cristo, que tendrá
lugar al final de los tiempos” (Misal Romano, Nº 39)
“El adviento tiene una
triple dimensión: histórica, en recuerdo, celebración y actualización del
nacimiento de Jesucristo; presente, en la medida en que Jesús sigue naciendo en medio
de nuestro mundo y a través de la liturgia celebraremos, de nuevo, su
nacimiento; y escatológica, en preparación y en espera de la segunda y definitiva
venida del Señor”.
“El adviento, en su mismo término, en
su palabra, es y … El adviento es tiempo de
esperanza gozosa y espiritual. No es tanto un tiempo como la cuaresma de
penitencia, sino de gozo, de espera y esperanza gozosa. Toda la liturgia de
este tiempo persigue una finalidad concreta: despertar en nosotros sentimientos
de esperanza, de espera gozosa y anhelante”. (Vicent Ryan)
“El adviento es un
tiempo atractivo, cargado de contenido, evocador, válido… Vivir el adviento
cristiano es revivir poco a poco aquella gran esperanza de los grandes pobres
de Israel… Vivir el adviento es ir adiestrando el corazón para las sucesivas
sementeras de Dios que preparan la gran venida de la recolección, recolección
exitosa para todos los que desde su lucidez o ignorancia aportan su lucecita de
amor y de ternura… La vida es todo adviento o hemos perdido la capacidad de que
algo nos sorprenda grata y definitivamente… La esperanza es la virtud del
adviento. Y la esperanza es el arte de caminar gritando nuestros deseos”.
(Vicent Ryan)
Este tiempo permite a
cada uno de nosotros a vivir la alegría de la Esperanza, la alegría de la Misericordia de Dios con
nosotros.
Existe una estrecha relación entre los conceptos
"llegada" y "espera". Recordemos que vivimos en una
sociedad que no sabe esperar, que todo lo quiere rápido. Ésta es la dinámica a
la que nos tiene acostumbrado nuestra forma de vivir. Tenemos comidas rápidas,
autopistas para correr a mayor velocidad, ordenadores más rápidos... porque
"El tiempo es dinero". Antes se tardaban siglos en construir una
catedral, un castillo, un puente, los libros se escribían a mano y se tardaban
años en ello... Pero como no sabemos esperar, adelantamos la Navidad. En el
tiempo que precede a la fiesta de la Navidad, la Iglesia suele poner en la
liturgia los textos proféticos que hablan de la venida del Mesías y suscitan la
expectación del pueblo de Dios. Y así nos hemos ido acostumbrando a considerar
el tiempo de adviento bajo el signo de la expectación. La actitud humana de
este período del año que en la liturgia es la del anhelo y expectación de la
venida del esposo.
El tiempo de
Adviento es como una escuela donde aprendemos a esperar. Si bien es cierto que
es una preparación inmediata a la Navidad, se da énfasis a la idea de que el
Salvador volverá para darnos participación en la gloria que conquistó con su
muerte y resurrección.
El Adviento debe ser un
tiempo en el que cada uno reflexione su actitud para con Dios y para con nuestro prójimo, es menester re descubrir el misterio
del amor, esa ternura que solo él nos puede otorgar por llamarnos hijos. Es un espacio en el que debemos acercarnos a vivir la alegría de la reconciliación,
mucho más ahora, puesto que celebraremos
por invitación del Santo Padre el Papa Francisco el Año de la Misericordia.
Nuestro Obispo Mons. Vicente
Jiménez Arzobispo de esta Iglesia particular de Zaragoza nos dice: El Jubileo de la misericordia es
un tiempo extraordinario de gracia y renovación
espiritual, signo visible de la comunión de toda la Iglesia…
Con ello nos invita a
participar de la apertura solemne del Jubileo de la Misericordia el dia 13 de diciembre a las 17:00
Catedral Basílica Ntra. Sra. del Pilar.
Celebrar el Adviento supone una actitud
de atención, vigilancia y espera activa, vivir ni dormidos ni angustiados, ni despreocupados
ni con temor.
Lo nuestro es vivir en esperanza y
despertando esperanza.
No viene un ladrón a asustarnos y
despojarnos.
Buen Adviento
para todos mis amigos blogueros
Preparemos, por lo tanto, nuestros corazones para la venida del Señor, ahora en esta Navidad y cuando venga la Parusía o llegue nuestra muerte para que estemos, como los pastores, velando.