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jueves, 8 de enero de 2009

BAUTISMO


Terminamos estas Fiesta Navideñas, con la celebración del Bautismo de Jesús. Antes de dar comienzo a su misión apostólica Nuestro Señor es bautizado por Juan, el Bautista, como hoy recordamos. De los varios detalles que nos ofrece el evangelio propio de esta fiesta, nos fijaremos esta vez únicamente en esa manifestación de la Trinidad –"Teofanía"– que, al comienzo de la vida pública de Jesucristo, pone de manifiesto en cierta medida todo el Evangelio. El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, por así decir, se hacen ver. Es como si, por unos instantes, abandonara Dios su trascendencia absoluta respecto al hombre, para que éste tenga alguna experiencia de Él y así pueda constar para siempre.
La fuerza de la razón.- "Mirad a mi siervo, a quien sostengo; mi elegido, a quien prefiero. Sobre él he puesto mi espíritu, para que traiga el derecho a las naciones" (Is 42, 1). El siervo de Yahvé, personaje que nos describe el profeta y que prefigura a Jesucristo. En él se conjugan la servidumbre y el poder. Es el amado del Padre, el preferido, el elegido. La voz tremenda de Dios rompe el silencio de las aguas del Jordán: "Este es mi hijo muy amado". Y el Espíritu, como una paloma, aletea sobre su cabeza. Jesús queda ungido en aquel momento, preparado para la misión sagrada por la que bajó a la tierra: salvar a los hombres, traer el derecho a las naciones. Derecho constituido por una Ley dada por Dios y que hace posible la paz, la alegría, el amor verdadero. Una Ley que está en vigor en todas las naciones, y en todos los tiempos. Ley que no pasará jamás, aunque pasen los cielos y la tierra. Ley escrita en nuestros corazones, promulgada por Dios y ratificada por Cristo, el "perfecto Dios y perfecto hombre"…
dice San Agustín que "valía tanto como valía Juan. Era un bautismo santo, porque era conferido por un santo, pero siempre hombre. El bautismo del Señor, en cambio, valía tanto cuanto el señor: era, por tanto, un bautismo divino, porque el Señor es Dios". Nosotros hemos recibido el auténtico bautismo "en el Espíritu Santo".

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